Hábitos que aceleran el envejecimiento, y cómo evitarlos

En la búsqueda de una vida larga y saludable, especialistas han identificado los errores cotidianos más comunes que afectan la longevidad y la calidad de vida. Una encuesta de US News & World Report realizada a 53 expertos en medicina, nutrición y fitness reveló cuáles son los factores más dañinos para la salud con el paso de los años.

Los cuatro hábitos que más afectan el envejecimiento

  1. Inactividad física

  • Es el factor más nocivo, señalado por el 57 % de los especialistas.

  • La falta de ejercicio acelera el envejecimiento celular al reducir la longitud de los telómeros, favorece la inflamación y causa pérdida de masa muscular.

  • La OMS recomienda al menos 150 minutos de actividad moderada por semana y dos sesiones de fortalecimiento muscular.

  1. Tabaquismo

  • Identificado como el segundo hábito más dañino (34 % de los expertos).

  • Fumar debilita el sistema inmune, daña las células y aumenta el riesgo de cáncer, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, diabetes tipo 2 y enfermedad pulmonar obstructiva crónica.

  1. Consumo de ultraprocesados

  • Estos productos pueden llegar a representar hasta el 70 % de la dieta en algunos países.

  • Salchichas, papas fritas y bebidas azucaradas están asociados a obesidad, diabetes tipo 2, cáncer, depresión, ansiedad y muerte prematura.

  • Su consumo habitual genera efectos acumulativos negativos y puede fomentar adicción.

  1. Falta de sueño reparador

  • Subestimado, pero clave para la reparación celular, la consolidación de la memoria y la eliminación de toxinas.

  • Dormir menos de 7 horas diarias impacta la salud física y mental, aumentando el riesgo de deterioro cognitivo, estrés y enfermedades crónicas.

Un enfoque integral del bienestar

Más allá de estos cuatro factores, los especialistas destacan la importancia de un enfoque holístico de la salud que incluya:

  • Actividad física regular.

  • Alimentación equilibrada.

  • Descanso adecuado.

  • Manejo del estrés.

  • Bienestar emocional y social.

La conclusión de los expertos es clara: pequeños cambios en la rutina diaria pueden marcar una gran diferencia en la longevidad y en la calidad de vida.