ONU condena la última oleada de ataques rusos contra Ucrania

Naciones Unidas ha condenado este miércoles la última oleada de ataques llevados a cabo por el Ejército de Rusia contra varias localidades de Ucrania, que ha dejado decenas de muertos y más de un centenar de heridos, mientras que ha interrumpido los servicios básicos en territorio ucraniano.

El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha dicho que le «horroriza especialmente el elevado número de víctimas civiles en la ciudad de Ternópil, en el oeste de Ucrania, a cientos de kilómetros de la línea del frente», mientras que ha indicado que «el horror de los potentes misiles de largo alcance, combinado con las oleadas de drones», ha quedado «dolorosamente expuesto esta mañana en Ucrania».

«La población civil y la infraestructura civil están claramente protegidas por las leyes de la guerra. Los patrones recurrentes de aparentes violaciones de los principios fundamentales del Derecho Humanitario de distinción, proporcionalidad y precaución suscitan una preocupación particularmente grave y deben ser investigados de forma inmediata, exhaustiva e independiente», ha sostenido.

SEXTO ATAQUE A GRAN ESCALA DOCUMENTADO

Turk ha incidido en que este «aparente ataque específico contra la infraestructura energética se produce justo al inicio del invierno», pero es, además, el sexto ataque a gran escala de este tipo que su oficina ha documentado en menos de dos meses, dejando a la población civil sufriendo cortes de luz diarios y, en algunas zonas, interrupciones en el suministro de agua y calefacción.

En este contexto, ha pedido a Moscú que «cese de inmediato su ataque armado contra Ucrania» y que «retire todas sus fuerzas militares de territorio ucraniano, haciendo hincapié en que «debe cumplir con sus obligaciones internacionales».

Por su parte, el coordinador humanitario para Ucrania, Matthias Schmale, ha lamentado a través de un comunicado que «desde Járkov, en el este, hasta Ternópil y la región de Ivano-Frankivsk, en el oeste, las familias han perdido a seres queridos, han sufrido heridas y han visto sus hogares destruidos». «Su sufrimiento es inconcebible», ha manifestado.

UN CENTENAR DE HERIDOS, INCLUYENDO MENORES

Asimismo, ha subrayado que además de que se han cobrado la vida de más de una veintena de civiles y ha dejado alrededor de un centenar de heridos, incluidos niños, «los ataques también han dañado la infraestructura energética, provocando apagones de emergencia y agravando los efectos de ataques anteriores». A ello se suma que en algunas zonas las temperaturas descienden por debajo de cero y ponen a «millones de personas en grave riesgo».

«Este daño constante a la población civil y la destrucción de infraestructura civil esencial son inaceptables. El Derecho Humanitario prohíbe claramente los ataques contra civiles y bienes civiles vitales para su supervivencia. Deben adoptarse todas las medidas necesarias para protegerlos. Nunca deben ser un objetivo», ha declarado.