
Un escándalo sexual protagonizado por monjes budistas en Tailandia reveló esta semana el fastuoso modo de vida de algunos de ellos y llevó a los devotos a cuestionar su fe en esta religión tan arraigada en el reino del sudeste asiático.
La policía detuvo esta semana cerca de Bangkok a una mujer de 35 años apodada «Golf», acusada de mantener relaciones sexuales con al menos 11 monjes y de amenazarlos con divulgar pruebas de sus encuentros íntimos si no le pagaban dinero.