MIAMI.- Los árbitros robot serán llamados a las Grandes Ligas la próxima temporada.
El comité de competición del béisbol de Grandes Ligas aprobó el martes el uso del llamado “Sistema Automatizado de Bolas y Strikes” en las ligas mayores a partir en 2026.
Los árbitros humanos seguirán señalando bolas y strikes, pero los equipos podrán desafiar dos decisiones por juego y obtener apelaciones adicionales en entradas extra. Los desafíos deben ser realizados por un lanzador, receptor o bateador, señalados tocando su casco o gorra, y un equipo retiene su desafío si tiene éxito. Las revisiones se mostrarán como gráficos digitales en las pantallas de video del campo.
La incorporación de los árbitros robot probablemente reducirá las expulsiones. Según MLB, el 61,5% de las expulsiones entre jugadores, managers y entrenadores el año pasado estuvieron relacionadas con bolas y strikes, al igual que el 60,3% esta temporada hasta el domingo. Las cifras incluyen expulsiones por comentarios despectivos, lanzar equipo mientras se protestan decisiones y conducta inapropiada.
Los árbitros de Grandes Ligas decretan correctamente aproximadamente el 94% de los lanzamientos, según UmpScorecards.
El mánager de los Cleveland Guardians, Stephen Vogt, dijo que los jugadores tendrán que adaptarse.
“Es un gran cambio”, dijo Vogt previo al inicio de una crucial serie de tres juegos contra Detroit Tigers. “Lo vimos un poco en los entrenamientos de primavera. Es una nueva regla y vamos a tener que aprender a usarla. Vamos a aprender a adaptarnos a ella. Te puede gustar o no, no importa. Llegó. Cambiará el juego. Cambiará el juego para siempre».
El ABS, que utiliza cámaras Hawk-Eye, ha sido probado en las ligas menores desde 2019. La Liga Atlántica independiente probó el sistema en su Juego de Estrellas de 2019 y MLB instaló la tecnología para la temporada de la Liga de Otoño de Arizona que reúne a los mejores prospectos.
En Triple A, al inicio de la temporada 2023, la mitad de los juegos usaron los robots para las bolas u strikes y la otra mitad tuvo a un humano tomando decisiones sujetas a apelaciones de los equipos al ABS.
MLB usó el sistema de desafíos este año en 13 estadios de entrenamiento de primavera que albergaron a 19 equipos para un total de 288 juegos de exhibición. Los equipos ganaron el 52,2% de sus desafíos de bolas y strikes (617 de 1.182) desafíos.
En Triple A esta temporada, el promedio de desafíos por juego aumentó a 4.2 desde 3.9 hasta el domingo y la tasa de éxito cayó al 49,5% desde el 50,6%. Las defensas tuvieron éxito en el 53,7% de los desafíos este año y las ofensivas en el 45%.
Los equipos en Triple A no recibieron desafíos adicionales en extra innings. La propuesta aprobada el martes incluyó una disposición que otorga a los equipos un desafío adicional por cada entrada si se quedaron sin desafíos.
MLB ha experimentado con diferentes formas e interpretaciones de la zona de strike con el ABS, incluidas versiones que eran tridimensionales. Actualmente, señala strikes únicamente basado en donde la bola cruza el punto medio del plato. La parte superior de la zona de strike es el 53,5% de la altura del bateador y la parte inferior el 27%.
“A lo largo de este proceso hemos trabajado en implementar el sistema de una manera que sea aceptable para los jugadores”, dijo el comisionado Rob Manfred en un comunicado. “La fuerte preferencia de los jugadores por el formato de desafío en lugar de usar la tecnología para llamar cada lanzamiento fue un factor clave en la determinación del sistema que estamos anunciando hoy”.
El sistema de desafíos introduce el ABS sin eliminar el encuadre de los lanzamientos, un arte sutil donde los receptores usan su cuerpo y guante para intentar hacer que los lanzamientos al límite parezcan strikes. El encuadre se ha convertido en una habilidad crítica para los receptores, y había preocupación de que un ABS completo haría obsoletos a algunos receptores defensivos.
No es que a todos les encante.
“La idea de que la gente sea pagada por hacer trampa, por robar strikes, por mover un lanzamiento que no es un strike a la zona para engañar al oficial y convertirlo en un strike está más allá de mi comprensión”, señaló el mánager Bobby Valentine.
Conformado por 11 miembros, el comité de competición incluye al presidente de Seattle Mariners, John Stanton; al CEO de St. Louis Cardinals, Bill DeWitt Jr.; al presidente de San Francisco Giants, Greg Johnson; al CEO de Colorado Rockies, Dick Monfort; al CEO de Toronto Blue Jays, Mark Shapiro; y al presidente de Boston Red Sox, Tom Werner.
Los jugadores incluyen a Corbin Burnes y Zac Gallen, de Arizona Diamondbacks; Casey Mize, de Detroit Tigers; Cal Raleigh, de Seattle Mariners; y Austin Slater, de los New York Yankees; con Ian Happ, de los Chicago Cubs, como suplente de Mize, de Tigers. Los representantes del sindicato toman sus decisiones basadas en la opinión de los jugadores de los 30 equipos. Bill Miller es el representante de los árbitros.
of-am
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