NUEVA YORK.- La madre de un hombre que presuntamente torturó y mató a su novia dominicana de 21 años en El Bronx fue arrestada luego de que la policía determinara que ella ayudó a limpiar la escena del crimen.
Naida Jorge, de 54 años, fue acusada de asesinato, homicidio involuntario, obstrucción de la justicia, ocultamiento de un cadáver y manipulación de pruebas físicas por la muerte de la joven dominicana Princesa Encarnación Soto.
Joseph Kenny, jefe de detectives del Departamento de Policía de Nueva York, dijo que Jorge intentó limpiar la escena del crimen. La policía continúa la búsqueda de Robert Strother, de 27 años, novio de la víctima e hijo de la acusada.
Informó que Encarnación Soto, quien apenas respiraba cuando fue encontrada con el cuerpo magullado el pasado martes, había sido torturada y sometida a actos sádicos dentro de un apartamento en Fordham Heights, antes de ser empujada por las escaleras.
En mayo de este año, la policía ya había auxiliado a Princesa Encarnación Soto, luego de recibir una llamada de Strother denunciando que su novia había sido violada por varios hombres en el techo del edificio.
Sin embargo, las autoridades determinaron que la llamada fue falsa y que se trataba de un intento por encubrir los maltratos que la joven sufría.
«La madre y el hijo inventaron la historia de la violación porque nuestra víctima estaba tan herida que necesitaba atención médica», afirmó Kenny.
Kenny explicó que los agentes respondieron a una llamada al 911 antes de descubrir a Encarnación Soto en las escaleras. Siguieron un rastro de sangre que los condujo al apartamento en Grand Concourse, donde se cree que Strother la torturó.
«No tenía sangre mientras yacía en la escalera y llevaba ropa limpia que no presentaba rastros de sangre. Por lo tanto, existe la posibilidad de que alguien haya limpiado su cuerpo, le haya puesto ropa limpia y luego la haya dejado allí», señaló.
Reveló que «las heridas fueron infligidas para causar dolor, no para matarla».
La policía también declaró que la joven fue atada, apuñalada desde la cabeza hasta los pies y posiblemente golpeada con un martillo antes de ser empujada por las escaleras.
«Creemos que estaba atada a la cama por la sangre que había en ella», detalló Kenny. «Tenía marcas de cortes en los muslos, en la parte superior de los brazos y en los hombros. Las de las piernas eran recientes. Las del torso parecían estar en proceso de cicatrización».
Robert Strother fue captado por cámaras de seguridad saliendo del edificio en el Bronx y permanece prófugo.
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